Tarta de turrón

Una vez más, una cena con mis amigas de la diplomatura fue la excusa perfecta para perpetrar un poste jejejeje.

Como ya estamos a las puertas de Navidad y aún no había probado nada dulce de esta época, decidí hacer una tarta de turrón que vi en el blog de Javirecetas.

Salió muy rico aunque la próxima vez cambiaré de galletas, para hacer la base prefiero las tipo "digestive" porque estas se fusionaron bastante con el postre y en algunas zonas no se distinguían muy bien de la tarta de turrón.

Os dejo ya con la receta.

Ingredientes (para 8-10 personas):

• 4 huevos
• 400 ml de nata para cocinar
• 300 gr de turrón de Jijona (del blando)
• 100 gr de mantequilla (sin sal)
• 50 gr de azúcar
• 25 galletas María
• Puñado de crocanti de almendras (para decorar).

 

En la receta original pone cómo hacer el crocanti, yo por un fallo de mi novio al ir a comprar las almendras picadas me lo encontré ya hecho :)

Preparación:
Calentamos la nata en un cazo, es importante que no llegue a hervir. Echamos el turrón en trozos pequeños y lo dejamos a fuego bajo.

En un bol mezclamos los huevos y el azúcar, batiéndolos bien con las varillas hasta que quede una mezcla homogénea.
Apagamos el fuego y con una batidora mezclamos el turrón y la nata, tiene que quedar sin tropezones. Apartamos la mezcla del fuego y le añadimos la preparación anterior de huevos y azúcar sin dejar de batir.

Precalentamos el horno a 180º y derretimos la mantequilla. Trituramos las galletas y les echamos la mantequilla, haciendo una pasta con la que crearemos una base en nuestro molde para el horno. Nos podemos ayudar de una cuchara para aplanar la base.

Vertemos la mezcla que tenemos en el cazo de turrón, nata, huevos y azúcar y lo metemos al horno durante unos 30 ó 35 minutos o en su defecto hasta que introduzcamos un palillo y salga limpio.

Dejamos enfriar un poco la tarta y añadimos a modo de decoración el crocanti. Metemos la tarta en la nevera unas 3 ó 4 horas y ya podemos desmoldarla y servirla. Yo hice la tarta de un día para otro y pasó la noche en la nevera.

Este fue el resultado, estaba muy rica y con un sabor suave a turrón, eso sí es para irse a hacer mucho ejercicio después :D

Galletas de mantequilla y vainilla.

Para la vuelta, os traigo estas galletas de mantequilla y vainilla que saqué del blog "Amantes de la cocina".

Son sumamente sencillas y tienen éxito asegurado. En mi caso nos las comimos tal cual, pero también las podéis decorar. Con un sencillo corta pastas que podemos adquirir en cualquier tienda a módico precio quedan preciosas, parecen de profesional y desprenden un aroma mmmm ¡qué ricas!.

Os dejo con la receta.

Ingredientes:

• 250 gr de harina
• 3 gr de levadura en polvo
• 1 pizca de sal
• 75 gr de azúcar
• 1 cdita de extracto de vainilla
• 1 huevo
• 125 gr de mantequilla a temperatura ambiente

Preparación:


Mezclar en un bol grande todos los ingredientes secos, formar un hoyo en el centro y agregar el huevo, el extracto de vainilla y la mantequilla cortada en dados. Amasar bien con las manos hasta que se quede una masa terrosa y homogénea. Estas masas no deben trabajarse mucho ya que la galleta no quedaría igual de rica.

Metemos esta bola de masa tapada con papel film a la nevera, durante al menos una hora para que se endurezca lo suficiente como para poder amasarla.

Pasado este tiempo la sacamos de la nevera y la dejamos a temperatura ambiente unos 10 minutos.

Precalentamos el horno a 180º y forrar la bandeja del mismo de papel vegetal.

Preparamos la superficie donde vayamos a trabajar con un poco de harina para que no se pegue y con un rodillo estiramos la masa hasta que quede un poco gordita. Con el corta pastas hacemos las figuras deseadas, en mi caso estrellas, campanas  y patos (buena combinación, si señor) y las vamos poniendo en el horno unos 10-12 minutos.

¡OJO¡
Estas galletas, igual que los hombres de jengibre, hay que sacarlas en cuanto se empiezan a dorar un poco por los bordes, porque sino luego se quedan muy duras y se queman enseguida.

Las dejamos enfriar en una rejilla y las decoramos o guardamos en un lugar seco para su conservación.

¡Que aproveche!

 Pd: Lo que se observa marrón en los patos y en una de las campanas es un lápiz de pastelero que me compré de vahiné que para mi horror no se secaba ni a la de mil y yo me tenía que llevar las galletas, así que acabó la fiambrera hecha un cristo y las galletas ni te digo, pero bien buenas que están.

¡He vuelto!

Ante todo, pedir disculpas por un período tan dilatado de ausencia pero bueno, la vida no siempre es predecible. ¡Lo siento!

Que no cunda el pánico, porque dentro de poco retomaré el blog, le haré un lavado de cara y volveré a presentaros mis dulces torturas jejeje.
Besos